La educación superior siempre ha tenido una lupa en su contra, ya que se espera que estas instituciones proporcionen una mano de obra bien educada y culta en nuestra sociedad. Dicho esto, también se espera que las universidades estén a la vanguardia de los logros tecnológicos más importantes. Con esto en mente, echaremos un vistazo a cómo las tendencias tecnológicas actuales se aplicarán en el sector de la educación superior.
4 Tendencias tecnológicas en la educación superior
En 1983, Issac Asimov escribió un artículo sobre lo que el futuro deparará. Cuando se le preguntó sobre la educación declaró: "las escuelas sin duda seguirán existiendo, pero un buen profesor de escuela no puede hacer nada mejor que inspirar la curiosidad que un estudiante interesado puede satisfacer en casa en la consola de su ordenador". Es casi chocante lo acertado de su predicción, pero vamos a profundizar en las 4 tendencias tecnológicas que conforman el sector de la alta tecnología:
1. Decisiones basadas en datos
Las universidades tienen muchos datos y no fue hasta hace poco que se les permitió hacer uso de los datos a los que tienen acceso. Con el acceso a estos datos y el aprendizaje automático, las instituciones de educación superior pueden tomar mejores decisiones basadas en los datos. Esta información puede utilizarse de muchas maneras, entre ellas, para promover la institución, establecer puntos de referencia para el rendimiento de los estudiantes, identificar áreas para mejorar el plan de estudios y más.
Otra forma en que las instituciones de educación superior han podido extraer valor del mundo real de sus datos es a través del software de automatización del flujo de trabajo. Mediante el uso de software de flujo de trabajolos datos introducidos en el sistema se filtran y almacenan automáticamente. De esa manera, el personal tiene acceso seguro e inmediato a toda la información en un lugar conveniente. Esto también facilita que los instrumentos de presentación de informes utilicen la información reunida mediante programas informáticos de procesos para generar informes con rapidez. Como resultado, procesos como la admisión de estudiantes, la nómina de sueldos y la matrícula pueden ser optimizados para ahorrar costos y tiempo a toda la institución.
2. La creciente amenaza a la seguridad
Las instituciones de educación superior tienen mucha información personal y confidencial de sus estudiantes y sus padres. También tienen que cumplir FERPA requisitos de privacidad y seguridad de los datos de los estudiantes. La Ley de Derechos Educativos y Privacidad de la Familia (FERPA) es una ley federal que protege la privacidad de los registros educativos de los estudiantes. La ley se aplica a todas las escuelas que reciben fondos bajo un programa aplicable del Departamento de Educación de los Estados Unidos.
En un reciente estudio de Netwrix encontró que El 77 por ciento de las instituciones educativas no están preparadas para los riesgos de la tecnología de la información. Para complicar aún más las cosas, la mayor parte de la TI en la educación superior está descentralizada, lo que significa que cada universidad dentro de la institución tiene sus propias políticas, procedimientos y herramientas de seguridad. La mayoría de las instituciones están recurriendo a la nube para gestionar estos datos sensibles. De acuerdo con AWS: “Las entidades cubiertas sujetas a la FERPA están recurriendo a la computación en nube como una forma muy eficiente de administrar y asegurar grandes cantidades de registros educativos y datos de estudiantes. La seguridad es un requisito funcional básico de FERPA, que requiere que la información de misión crítica sea protegida de robos accidentales o deliberados, fugas, compromiso de integridad y eliminación. AWS ofrece un conjunto completo de servicios globales de computación, almacenamiento, base de datos, análisis, aplicación y despliegue que permiten a las entidades educativas desplegar aplicaciones y servicios de forma rentable y con flexibilidad, escalabilidad y fiabilidad".
3. Aprendizaje activo
Las escuelas K-12 han usado aprendizaje activo para transformar los planes de estudio de sus cursos y las instituciones de educación superior pronto seguirán el ejemplo. El aprendizaje activo es una forma de aprendizaje que se esfuerza por involucrar a los estudiantes en el proceso de aprendizaje en lugar de sólo escucharlos pasivamente. Este método de aprendizaje crea un entorno más colaborativo que no se encuentra normalmente en las clases tradicionales. Universidad de Yale crearon un entorno de aprendizaje activo incluyendo 14 mesas redondas con capacidad para 126 estudiantes, 14 pantallas planas, 5 pantallas de proyección y 8 pizarras, de esto vieron, "Las primeras investigaciones cuasi-experimentales revelaron que la enseñanza en un ALC puede mejorar las actitudes de los estudiantes, la comprensión conceptual y los índices de aprobación, especialmente para las mujeres y los estudiantes de las minorías".
4. Inclusión
La web es un gran lugar de información, pero la mayoría de los sitios web no cumplen con las pautas de accesibilidad para las personas con discapacidad visual, incluidas las universidades. Para crear un verdadero sentido de inclusión, las instituciones de educación superior también deben darse cuenta de que la inclusión también comienza en línea. Por ejemplo, un ciego demandó a 50 universidades por violando el cumplimiento de la ADA con sitios web.
Peter Blanck, El profesor de derecho de la Universidad de Siracusa declaró: "No importa si hay 50 o 1.000 demandas", dijo Blanck. "Estos casos reflejan un problema sistémico más amplio: la falta de un compromiso firme de muchas instituciones para tratar de ser lo más inclusivas posible".
¿Qué es lo próximo en tecnología en la educación superior?
El año 2019 será el primer año en que la Generación Z, la generación que creció siempre conectada digitalmente, asistirá a instituciones de educación superior. Su nivel de conectividad jugará un papel importante en lo que esperan en el aula. Su necesidad de experiencias de aprendizaje auténticas, de aprendizaje inmersivo y de instrucción mediada por la tecnología conformará las tendencias tecnológicas que veremos en las universidades.
Parte de la adaptación de estas tendencias en la educación superior es hacer que todas estas nuevas herramientas de aprendizaje sean accesibles para todos desde un solo lugar. Esto es en lo que el software de flujo de trabajo sobresale en particular. Al conectar todas las herramientas de software al software de flujo de trabajo, tanto los estudiantes como el personal son capaces de acceder a múltiples recursos, como grados y aplicaciones desde un centro central. Como resultado, nadie se queda atrás al buscar sus últimas tareas, y los instructores se ahorran el dolor de cabeza causado por la administración básica y pueden centrarse en proporcionar una mejor educación.